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15 cosas que pasan cuando vas a cortarte el pelo

¿Eres de las que te da pereza ir a las peluquerías pero sabes que tienes que ir? Veamos 15 de las cosas que suelen pasar cuando vas a la peluquería:

1. Tienes que esperar

Sí, siempre tienes que esperar, da igual que hayas reservado 2 meses antes, y estés tachando los días para ir, cuando llegas, siempre te dicen, siéntate, enseguida estoy contigo, y ves como tu tiempo que estaba reservado, es usado por una choni.

2. Tu peluquero no está

No dejas que tu pelo lo toque nadie excepto ésta persona, y hay veces que tienes que hacerte la loca mirando el móvil, una revista o haciendo que hablas por teléfono, para que el otro peluquero que te mira sin quitarte ojo, no se abalance sobre ti, y tengas que decirle que prefieres esperar.

3. Cortan más siempre

La frase de “solo las puntas”, en la cabeza de cualquier peluquero es, “ok, te corto lo que quiera, tú me has dejado”, y antes de que le digas que lo quieres un poco más corto nada mas, ya he metido tijeretazo y ves como tu mechón cae al suelo, y tú te quedas inmóvil.

como tu peluquero, no hay nadie (iStock)

4. Laca siempre

Da igual el corte que te hagas, da igual que lo quieras limpio y que se te seque al aire, para ellos la laca es como el comer, si no te ponen un poco, no se quedan a gusto, y piensan que tu pelo se va triste, pero no, no se va triste, está colapsado y el agujero de la capa de ozono cada vez más grande.

5. Ese no es mi color

Cuando te vas a teñir, y te muestran la carta de color, da igual el que selecciones, nunca vas a tener el color que quieres en tu cabeza, y si, te podrás quejar, pero no te va a servir de nada,porque la culpa es tuya siempre, o bien porque tu pelo es muy fino, o muy rizado, ect, ellos nunca se equivocan.

6. Ayudantes

Si hay una raza desconocida, esa es la raza de las ayudantes, siempre son unas chonis que intentan aprender algo de peluquería, pero lo que no saben es que nunca vas a dejar que ellas te toquen con las tijeras. Si tú llevas esos pelos y te ves bien, no quiero imaginar qué crees que me quedará bien a mí.

7. Batas

Una de las dudas siempre es si esa bata que te está ahogando, ha sido lavada alguna vez, o lleva en el mismo rincón de la peluquería desde que abrió hace veinte años. Con su color negro, siempre parece que está  limpia, pero crucemos dedos para que así sea.

8. Peluquera cardada

Cuando entras siempre ves a esa persona que te va cortar el pelo, esa mujer que se levanta a las 5 de la mañana para ponerse 5 botes de laca y hacerse esculturas en su peinado, si es que son muchas veces obras de arte, aunque tu no quieres ni que te roce.

9. Dejarte en sus manos

Es la peor frase que le puedes decir, porque lo que más le gusta a un peluquero es cortar, así que asume que tu pelo va a pasar de largo a la cintura, a un corte tipo hombre pero eso sí, siempre con el flequillo desfilado para que te de movimiento, es así.

Nunca hay que fiarse de lo que te digan (iStock)

10. Preguntar el precio

Piensas que van a pensar que eres una rata y una tacaña, pero chica, no está la cosa como para no preguntar qué vale el corte de pelo, porque quieres saber si tienes que ir a una clínica a que te quiten un riñón, o vas a poder pagarles en efectivo.

11. Temas de conversación

Vale que es tu peluquero de confianza, pero muchas veces no sabes de qué vas a hablar con él, te sientes como si estuvieses en un ascensor, pero no de 5 plantas, sino de 500 por el tiempo que vais a estar allí los dos, sin saber que deciros.

12. Dónde mirar

Muchas veces tampoco sabemos dónde poner la mirada porque si le miras, pensará que quieres algo, como hablar o que te gusta, y si no, solo puedes mirarte al espejo, y ver lo guapa que estás con la bata, el pelo empapado y cada vez más y más corto, vamos, un cuadro.

13. El móvil

Si, piensas que puedes estar más de 10 minutos sin mirar el teléfono, pero estás deseando que le pida algo su compañero, para tu rauda y veloz, comprobar que no te  ha escrito nadie, o hacerte un selfie que luego colgarás en instagram, por supuesto.

14. Agua en la oreja

Es un método de tortura china, estoy convencido, porque aunque estés casi como los protagonistas de Titanic, ellos creen que tu pelo está seco y deben seguir pulverizando más y más, hasta que tus orejas quedan inundadas. La próxima hay que ir con tapones.

El lavado, el momento más delicado (iStock)

15. Peinado

Otro de los temas peliagudos, porque la peluquera siempre va a creer que el mejor peinado es el suyo, e intentará peinarte a su imagen y semejanza, pero debes de ser fuerte y enfrentarte a ella, animo amiga.

A.Mateos

A.Mateos es redactora especializada en belleza. Graduada en periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, siempre está al tanto de los mejores productos y rutinas de belleza las cuáles comparte a través de sus artículos.

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