Cómo ayudar a alguien que ha sufrido abuso sexual

Las personas que han pasado por situaciones de abuso sexual suelen quedar marcadas de por vida. La crudeza de estas experiencias es una pesada losa que cuesta quitarse de encima. Sin embargo, con fuerza de voluntad, paciencia, ayuda profesional y apoyo de los seres queridos, bien familiares y amigos, es posible volver a llevar una vida normal y que todo eso quede en el recuerdo…Las maneras en las que se puede ayudar alguien que ha sufrido abusos no son muchas pero sí son suficientes para aliviar el dolor indescriptible que esa persona está experimentando.

1. Ayuda profesional. Esto es fundamental. Por más que podamos aconsejar a una amiga o a un amigo en relación a estos temas, por mucho que le pongamos nuestro hombro para llorar, lo mejor es que acuda a especialistas que les den estrategias para superar tan difícil trance. Los psicólogos y/o psiquiatras, según las circunstancias personales de cada uno, son un auténtico salvavidas para quienes lo ven todo negro a su alrededor y se sienten perdidos.
2. Animarles a denunciar. Es fundamental denunciar estos casos. Es comprensible el miedo a las represalias por parte de la persona que ha infligido tales abusos, también la vergüenza al qué dirán de nosotros cuando todo se sepa; sea como fuere, hay que dar parte a las autoridades para que el/la culpable paguen por esos actos y, lo más importante, jamás puedan volver a cometerlos.
3. Un hombro sobre el que llorar. Todo trauma requiere de un proceso de duelo y hay que darle derecho a las víctimas a que pasen por las lágrimas, los llantos, del dolor a la rabia, a las ansias de venganza. Es bueno que se desahoguen en relación a todo esto, que sepan que nos pueden contar todo lo que quieran o que si solo necesitan un hombro sobre el que llorar allí estaremos. Ese apoyo moral es fundamental.
4. Nuevas ilusiones, planes para volver a disfrutar el lado bueno de la vida. Proponerle planes interesantes es una de las mejores formas de devolver a la vida a esa persona que siente que algo ha muerto en su interior. Una excelente idea es un viaje, poner tierra de por medio y partir hacia algún país que pudiera gustarle especialmente. Otras ideas pueden ser planes de fin de semana de teatro, cine, salidas con amigos, cenas. El contacto con la naturaleza es una opción alternativa y está demostrado que este es muy beneficioso para el bienestar del ser humano. Seguro que consigues arrancarle una, dos y tres sonrisas nuevas a ese alguien al que quieres echar una mano.
5. Hacerle saber que no está sola. Existen asociaciones de víctimas de abusos sexuales por toda España. El saber que no es la única persona que ha pasado por este trance puede ayudar a salir del bache. No dudes en buscar cuál es la organización que tenéis más cerca y acompaña a tu amig@ en la primera visita. Tal vez no es capaz de dar el primer paso pero para eso estás a su lado.