Cómo saber que te es infiel

Poner la mano en el fuego por tu pareja en un país que cuenta con más de un millón de infieles ‘reconocidos’ –una conocida web de citas para personas que tienen relaciones estables supera el millón de usuarios– podríamos tomarlo hoy en día como un acto de fe… ¿O no? Y es que nadie está a salvo de morder la manzana prohibida en un momento determinado de la vida o de ser la ‘víctima’ de una infidelidad.

Nos guste más o menos, el ser ‘cornudo’ o ‘cornuda’ está a la orden del día y el ser conscientes de ello nos puede llevar a obsesionarnos con el tema: ¿Estará engañándome con otr@? ¿Llega tarde a casa por distracciones que nada tienen que ver con el trabajo o el ir al gimnasio? Si eres de las que tienen dudas acerca de la fidelidad de su novio/marido, toma nota de estas cinco señales que son indicios muy significativos de que tu chico tiene un/a amante.Ahora con el verano es mas complicado mantener una relación, entre las vacaciones con amigos, la familia, a veces no tenéis tanto tiempo para ver. Por ello te damos una serie de claves para saber si te es infiel. Toma nota y empieza a analizar cómo se comporta, ¡el lenguaje no verbal es el mejor de los delatores!

1. No se separa jamás del móvil y hace lo imposible porque no veas con quién se está ‘whatsapeando’. Sabes que chatea porque te conoces los colores del programa de chat mejor que tu nombre y apellidos. Lo miras de reojo y ves como sonríe mientras escribe, ¡qué rapidez con las teclas! Ni tú aprendiendo mecanografía has llegado a tener semejante dominio del teclado del móvil. Le preguntas con quién habla y siempre titubea hasta que suelta “con mi madre” –¿perdona? ¿desde cuándo mi suegra usa whatsapp?–, “con Paco”, “con mi jefe”… Y si ve que te acercas rápidamente lo cierra y deja el teléfono bloqueado.

2. Llega tarde a casa con demasiada frecuencia.Tiene excusas para cualquier día de la semana: los lunes va al gimnasio, los martes juega a papel con los amigos, los miércoles se queda hasta tarde en la oficina, el jueves toca el ‘afterworking’ con los colegas del trabajo y algún que otro día del fin de semana sale a comprar tabaco y tarda horas en volver. El caso es que por más que diga que practica ejercicio sigue con la misma barriguita cervecera, ¿eh? Intenta confirmar esas coartadas, bien llamando a la ‘ofi’ para ver si realmente está trabajando, presentándote de casualidad un día de ‘afterworking’ en el bar donde se supone se toman unas cervezas, pregunta a alguno de sus amigos con los que en teoría entrena para ver si le sacas información extra… Recuerda siempre que tan importante como lo que nos dicen son las maneras, ¡lenguaje no verbal!

3. “Estoy muy cansado” o “me duele la cabeza”, sus ‘favoritas’ para dejarte compuesta y sin ‘tema’. Cuando lo buscas para mantener relaciones sueles recibir con más frecuencia de lo normal un ‘no’ disfrazado de excusas de lo más inverosímiles. “Es que hoy ponen ‘Velvet’”… ¿En serio?!?!? Que me diga que juega el Real Madrid tiene un pase, pero no me trago que ahora le flipe ver esta telenovela a la española de la que tanto ha rajado antes. Si las negativas empiezan a ser algo cotidiano plantéate que tal vez esté teniendo su desahogo sexual fuera de casa.

4. Se cuida más que nunca: dieta, running, ropa nueva…Te recuerda a cuándo empezabais a salir. Se ponía siempre muy guapo, estaba en forma, se miraba en el espejo y se tocaba el pelo. Poco a poco fue descuidando su aspecto, ganó algunos kilos y eso de salir a correr solo si se le escapaba el bus. Si detectas una repentina preocupación por su aspecto físico empieza a dudar de él, ¡algo está pasando y no pinta nada bien!

5. Cualquier situación es ‘perfecta’ para que prenda la llama… ¡de la pelea!Cero paciencia. Cada vez se suceden más enfrentamientos y peleas y la mayoría de las veces por motivos de lo más absurdos e insustanciales. Está ‘a la que salta’, como se dice coloquialmente, y cuando hay alguna discusión su respuesta es la ‘no respuesta’ y el salir dando un portazo. Si te reconoces en estos casos tienes un motivo más para pensar que puede que haya algo más detrás…