Tras la liberación de Britney Spears de la tutela paterna en noviembre de 2021, muchos creímos que la icónica artista finalmente había logrado la tan ansiada libertad. Sin embargo, parece que la situación actual puede ser diferente. Según se advierte en el documental de ‘TMZ’, titulado ‘Britney Spears: The Prince of Freedom‘, su círculo más cercano muestra una gran preocupación por su estado de salud. A pesar de haberse desvinculado de la tutela, existe una creciente inquietud en torno a su bienestar.
En el mencionado documental, se afirma que la cantante ha llevado una vida aislada y ha experimentado un exceso de sueño desde que obtuvo su libertad. Según Charles Latibeaudiere, productor ejecutivo de ‘TMZ’, Britney vive prácticamente en aislamiento y pasa la mayor parte del tiempo sola en su casa. Esta situación plantea preocupaciones sobre su bienestar y su estilo de vida tras la terminación de la tutela.
En el documental, Brad Appleton, director de noticias de ‘TMZ’, añade que a veces Britney Spears conduce hacia un camino de tierra tranquilo, se estaciona y se dedica a meditar. Además, se menciona que la cantante tiene patrones de sueño irregulares, siendo descrita como una «durmiente compulsiva». Según Appleton, ella puede dormir durante tres días seguidos y luego pasar varios días sin dormir en absoluto. Estos comportamientos resaltan las preocupaciones sobre su salud y bienestar mental en este nuevo capítulo de su vida tras la finalización de la tutela.
El documental también revela que Britney no ha visto a sus hijos, Sean de 17 años y Jayden James de 16, desde hace más de un año. Esto se debe al comportamiento de la cantante en las redes sociales, que ha generado tensiones en la relación con sus hijos. Según Katie Hayes, productora de ‘TMZ’, las tensiones llegaron a un punto en el que los niños dejaron de responder a los mensajes de texto de su madre, lo que provocó su furia. Sin embargo, recientemente ha habido un intercambio de mensajes entre Britney y sus hijos, lo cual ha ayudado a romper el hielo en su relación.
Hasta el momento, Britney no ha comentado nada sobre el documental que lleva su nombre. Sin embargo, su pareja, Sam Asghari, ha expresado su descontento a través de su cuenta de Instagram, calificándolo de «repugnante». Sam cuestiona cómo se puede tomar a una persona tan influyente de su generación, como la Princesa del Pop y la querida de Estados Unidos, y ponerla en una situación en la que su padre tiene el control total sobre ella, dictándole qué hacer, qué beber, a quién ver, y luego utilizarla como una máquina de hacer dinero. Estas palabras de Sam reflejan su apoyo y preocupación por Britney ante las circunstancias que ha enfrentado en relación a la tutela y su explotación.
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