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Enseñar a comer bien a nuestros hijos es una de las labores más importantes de unos buenos padres. Debemos acostumbrarles desde pequeños a que lleven una alimentación y dieta equilibrada ya que a la larga, renunciar a los pequeños caprichos será beneficioso para su salud. España es el segundo país de Europa con más obesidad infantil, un dato preocupante teniendo en cuenta que la mayoría de familias son fieles a la dieta mediterránea. Os dejamos una lista de aquellos alimentos con los que tenemos que tener especial cuidado:

1. BOLLERÍA INDUSTRIAL

El principal problema de la bollería industrial es su alto nivel de grasa trans y conservantes sin ningún aporte nutricional. Un bizcocho casero puede ser una alternativa más saludable y al mismo tiempo apetecible.

2. REFRESCOS CON AZÚCAR O BEBIDAS ENERGÉTICAS

Los refrescos que no son light suelen tener azúcar y en menor y mayor grado un nivel alto de cafeína. Los niños de por sí suelen ser enérgicos y no necesitan bebidas que los alteren o peor aún, les genere adicción.

3. COMIDA RÁPIDA

Las hamburguesas, pizzas y otras comidas denominadas rápida o basura, tienen mayores niveles de grasa trans, conservantes y sal. Hay que acostumbrar a los niños a que este tipo de comida es para tomarla de vez en cuando y no de manera habitual. Otra alternativa es hacer las hamburguesas o pizzas en casa, con ingredientes más saludables.

4. DULCES, CARAMELOS Y GOLOSINAS

Los dulces, caramelos y golosinas tienen altos índices de azúcar, colorantes, jarabes de glucosa, cartílagos de animales y otros componentes nada saludables para los niños y su consumo debería ser moderado.

5. PALOMITAS Y BOLSAS DE FRITOS

Las palomitas de bolsa al microondas o las bolsas de fritos, contiene diferentes aditivos, sal, mantequilla y grasa que no aportan nada bueno a los niños, además de deshidratar y generar adicción. Las palomitas en sartén son más ligeras para una tarde de cine en casa.