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La depilación con láser es el método más definitivo para la eliminación total del vello no deseado, pero para que sea segura y efectiva, y, sobre todo, permanente (y sin miniaturización del vello), es necesario tener en cuenta varios aspectos. Hoy, de la mano de Instituto Médico Láser, te los desvelamos:

1. No presentar un bronceado reciente

2. No arrancar el vello antes de la depilación, ya que a veces tenemos esos tan temidos pelos enquistados.

3. Elegir el láser más adecuado para cada caso, zona y tipo de vello y de piel.

4. Saber que el vello claro es poco sensible al láser y responde pobremente al tratamiento.

5. Chequear el resultado, que debe ser homogéneo.

6. Controlar la repoblación inesperada, ya que una depilación láser bien hecha mantiene la piel libre de vello durante dos meses como mínimo. La reaparición del vello antes de dos meses indica una sesión poco eficaz.

7. Registrar el intervalo creciente entre sesiones hasta que el vello desaparezca por completo. La segunda sesión debe realizarse a los dos meses y medio, la siguiente a los tres, y las posteriores a los cuatro meses, seis y doce.

8. Rasurar el vello entre depilaciones láser con cuchilla o crema depilatoria: olvídate de la cera; y hacerlo también una semana antes del primer tratamiento.

9. Tras la sesión, esperar al menos tres o cuatro días para exponer la piel al sol, y utilizar una protección solar muy alta.

10. Aplicar crema anestésica una hora antes de la sesión, para aliviar las molestias, especialmente en las zonas más sensibles como las axilas o las ingles.