
Pep Guardiola y Cristina Serra se divorcian tras 30 años juntos
El reconocido entrenador del Manchester City, Pep Guardiola, y su esposa, Cristina Serra, han decidido separarse tras 30 años de relación y tres hijos en común. Esta noticia ha sido confirmada por fuentes cercanas al técnico a EL PAÍS, aunque sin revelar detalles adicionales, en línea con la discreción que caracteriza a Guardiola respecto a su vida privada.
Una decisión tomada con discreción
La pareja habría tomado esta decisión de manera conjunta el diciembre pasado. Como era habitual en su relación, ambos optaron por mantener la situación en privado hasta que la noticia se hizo pública. Según el podcast de las Mamarazzis de El Periódico, divulgado el 13 de enero, “han pedido a su entorno más íntimo que cierre filas y no explique a la prensa ningún tipo de detalle al respecto”.
A pesar de su separación, la relación entre Guardiola y Serra sigue siendo cordial. Ambos continúan priorizando el bienestar de sus tres hijos: María (24 años), Marius (22 años) y Valentina (16 años), con quienes disfrutaron de las recientes vacaciones navideñas en familia.
Un matrimonio marcado por la intimidad
Pep Guardiola y Cristina Serra contrajeron matrimonio en mayo de 2014 en una ceremonia civil íntima celebrada en el Ayuntamiento de Matadepera, Barcelona. En ese entonces, la pareja ya llevaba más de dos décadas de relación y habían formado una familia. Al enlace solo asistieron los padres de ambos y sus hijos, manteniendo su costumbre de vivir momentos importantes con discreción.
Durante estos años, ambos demostraron ser un apoyo mutuo. Mientras Guardiola desarrollaba su carrera como entrenador en equipos de élite como el FC Barcelona, el Bayern de Múnich y el Manchester City, Cristina Serra gestionaba una firma de moda, consolidando su carrera como empresaria.
Cambio de vida en 2016
En 2016, la familia se trasladó a Mánchester, marcando el inicio de una nueva etapa en la carrera de Guardiola. Tres años después, el diario británico Sunday Mirror informó que Serra regresó a Barcelona para involucrarse más en el negocio familiar, Serra Claret. Este movimiento suscitó especulaciones sobre un posible regreso de Guardiola al FC Barcelona, especialmente porque uno de sus hijos también retomó su educación en España.
En 2021, la pareja adquirió una mansión valorada en 10 millones de euros en Pedralbes, un barrio exclusivo de Barcelona. Aunque parecía un paso hacia una vida más estable, el tiempo demostró que la distancia y los compromisos laborales afectaron su relación.
Equilibrio entre la familia y trabajo
En una entrevista con Audi en 2014, Guardiola destacó la importancia del equilibrio entre el trabajo y la familia. “Es imposible separar trabajo y familia de forma estricta. Quien diga eso no tiene credibilidad. Pero en casa no soy ni técnico ni manager”, confesó. “Mi mujer y yo decidimos juntos. La armonía es muy importante. Eso es algo que aprendí muy pronto”.
Aunque Guardiola rara vez habla de su vida personal, en múltiples ocasiones ha mostrado admiración por Cristina Serra. “Mi mujer es la mejor del mundo en muchas cosas, pero especialmente en la moda”, comentó en una entrevista con el Manchester City hace un año.
PEP GUARDIOLA 💬 "La meva dona és la millor del món en moltes coses, però especialment en la moda. Així que quan em diu que no porti això o que no porti això altre, li faig cas" pic.twitter.com/l5hZlloJsp
— Manchester City (@ManCityCatala) January 20, 2024
La noticia de la separación ha captado la atención de los medios británicos, que han vinculado esta situación personal con la reciente mala racha del Manchester City y algunos comportamientos inusuales del entrenador. Comentarios como “enfrentamientos con aficionados” han generado debates sobre el impacto emocional de estos eventos en su desempeño profesional.