Inviptus

Hay cosas en la vida que son inamovibles y no las puede cambiar ni siquiera el destino, la casualidad o la divinidad con más poder. Ocurre por ejemplo con los descubrimientos históricos, cuyos protagonistas lo serán de por vida, pero también pasa con aspectos cotidianos de la vida, como por ejemplo con esa extraña costumbre universal de los ex de reaparecer.

No solo tienen suficiente con dejarnos, sino que por algún motivo desconocido que debe tener tanta fuerza como la ley de la Gravedad, todos vuelven a nuestras vidas.

Esto evidentemente ocurre sobre cuando no hay motivos aparentes para su marcha de fuerza mayor. Cuanto menores sean las explicaciones que te da, más opciones de que vuelva. Eso de “no te quiero lo suficiente” pronto se convierte en un “no sabes lo que tienes hasta que lo pierdes”.

Los ex que rompen injustamente siempre vuelven. Es parte de la sabiduría popular. Otra cosa es el tiempo que tardan en hacerlo, y que generalmente juega en favor de la persona que se ha quedado dolido, ya que cuanto más tiempo tarde su ex más superada tendrá la ruptura, de modo que le hará menos daño al volver y podrá observar y decidir desde la distancia qué hacer, sin estar todavía tan marcada por la ruptura.

Debes estar preparado para ello porque la probabilidad de que te ocurra es muy alta, y es conveniente saber que no siempre vuelven por amor. A veces, simplemente es que querían un cambio de vida radical y por interés o porque no era lo que esperaban tratan de dar marcha atrás. Afortunadamente no siempre es así. En ocasiones, la reflexión desde la distancia ayuda a ver las cosas como son y cómo se sienten en realidad.

Lo importante es que seas capaz de saber qué tipo de ex es al que te enfrentas cuando quiera volver a tu vida. Es clave diferenciar si hay egoísmo e interés o arrepentimiento. Si eres lo suficientemente fuerte como para mantenerte un poco distante y analizarlo, la decisión que tomes al respecto será la correcta. Y es que esta vez debes decidir tú en base a lo que tú quieras y creas.